La crónica de Volvo
Página 11
Por Christoph Büch (Berlin 2024)
En 2008, las series FH y FM recibieron otro lavado de cara. La zona superior de la parrilla ya no tenía adornos plateados en los laterales. La rejilla inferior del radiador en el FH era ahora de una sola pieza con una barra central pintada en el color de la carrocería, que en el FH 16 proporcionaba más refrigeración a través de cuatro aberturas. Todo tenía un diseño más moderno con sugerentes contornos armoniosamente redondeados y ahora había luces auxiliares independientes empotradas en la carrocería bajo los faros verticales. Había nacido la generación FH 3 o FM 3.
A partir de 2009, Volvo Trucks tenía una participación del 50% en el fabricante hindú Eicher. En 2011, el grupo sueco, con sus marcas Volvo, Renault y Mack, seguía ocupando el segundo puesto mundial, por detrás de Mercedes-Benz, con 240.000 unidades producidas. La gama Volvo estaba compuesta por las series FL (de 12 a 18 toneladas de peso bruto), FE (de 18 a 26 toneladas) y FM y FH en las clases de tamaño pesado. En la primavera de 2010, se añadió como nueva serie la FMX, para uso en obras. La cabina FM, adaptada para este fin, se asienta sobre un bastidor robusto equipado con ejes y engranajes específicos para los exigentes requisitos del sector de la construcción. El reposapiés de paragolpes, protector del cárter y partes bajas del motor y el gancho de arrastre estaban integrados en el robusto parachoques.
Las series FL y FE tenían la cabina adoptada de Renault. Su diésel common-rail tenía ahora una cilindrada de 7,2 litros y producía hasta 340 CV. Las series FH y FM disponían tanto de un motor de seis cilindros y 13 litros con hasta 540 CV, como de otro más pequeño de 10,8 litros con 330 o 450 CV. El motor tope de gama del FH 16 había alcanzado entretanto los 700 CV (2009) y requería variantes de transmisión especialmente reforzadas. Para cumplir la norma Euro 5, todos los motores recibieron filtros de partículas y el proceso SCR con inyección de AdBlue.
En 2013, las series FH y FM recibieron una nueva cabina. Esto marcó el nacimiento de su cuarta generación (FH 4). El enderezamiento del parabrisas anteriormente inclinado del predecesor aumentó el espacio interior en casi un metro cúbico. Visualmente, el frontal se caracterizaba por una gran parrilla negra que se estrechaba ligeramente en la parte inferior. Para mejorar las características de conducción, el FH recibió como opción una suspensión independiente con cremallera de dirección en el eje delantero. Como opción, la transmisión, denominada "I-Shift", funcionaba ahora con doble embrague. Además, había un sistema de control de transmisión denominado "I See", que determinaba las características topográficas de la ruta a recorrer mediante GPS y permitía así una conducción especialmente económica. Las pruebas realizadas en la prensa especializada demostraron que incluso los conductores experimentados se veían superados por este sistema de control electrónico en términos de consumo de combustible. Los diésel common-rail fueron evolucionados con un par motor mayor. El par máximo del diésel de 460 CV era de 2.800 Nm, que el propulsor entregaba de forma constante desde las 900 hasta las 1.200 rpm. Eran valores impresionantes que prometían un gran placer de conducción. En el momento de su lanzamiento al mercado, la norma Euro 5 estaba vigente. El paso a Euro 6 no tardaría en llegar.